Dec 16, 2022 8 min read

La vida en 0.5x📸

Esta semana no he parado de reenviar memes de The White Lotus, así que esperen algunos GIFs relacionados con la serie a lo largo de este newsletter.

¿Qué tal ha estado tu semana? ¿Qué tal estuvo la primera mitad de tu diciembre? Esta semana he recibido varios recorderis que aún queda tiempo para darme lo que necesito durante este mes de diciembre, y eso es lo que te quiero compartir e invitar a hacer el día de hoy. Si este mes se está sintiendo apurado, aún queda tiempo para enlentecerlo. Si este mes se está sintiendo solitario, aún queda tiempo para permitirme ser acompañada/o. Si este mes se está sintiendo abrumador, aún queda tiempo para regalarme calma. Hoy, te invito a que toques base con cómo estás para ir descifrando lo que necesitas. Te deseo en estas próximas semanas la presencia para estar y sentir lo que sea que está apareciendo emocionalmente para ti, con compasión y ternura radical.

Como siempre, te comparto el acompañamiento musical para esta edición. ¿Te parece si iniciamos con la reflexión de hoy?

El proceso de este newsletter es tan único como cada edición que escribo, curo y edito para ti. Hay semanas que el tema aparece con tanta facilidad y sencillez, que casi que se escribe solo. Hay otras semanas donde estoy convencida de lo que voy a escribir... hasta que no. Hay otras semanas donde me toma un poquito más de tiempo aterrizar lo que pasa por mi mente, porque no sé cómo elegir lo que más quiero compartir. Esta es una de esas semanas.

Cuando me senté a planear la edición de hoy, emergió en mí la pregunta: ¿de qué voy a escribir? Quizás pueda escribir sobre las experiencia del taller de fin de año que tuve este pasado miércoles; o, los desaprendizajes que aparecieron (o incluso que han aparecido) en mi mundo interno en las últimas semanas; o, de pronto, un mensaje de esperanza y compasión para estas últimas semanitas del año.

¿Cómo elegir cuál es más necesaria? ¿Cómo elegir cuál resuena más conmigo cuando todas se sienten importantes? Ante lo difícil que se sintió responder estas preguntas, decidí que hoy no voy a escribir de lo que está pasando por mi mente –aunque, quizás en el camino de lo que quiero contarte hoy, aparezcan algunas de las borradores que fueron saliendo en mi mente. Pero, hoy, me gustaría compartirte una herramienta que me ayuda cuando hay muchas ideas/emociones/pensamientos flotando: perspectiva.

No creo que sea casualidad que esto sea lo que está apareciendo ahorita. Hace algunas semanas decidí que esa sería mi palabra del año y compartí por qué la escogí en el taller. Pero, creo que quizás la imagen de eso cómo se ve, o la importancia de esta herramienta en mi vida, no apareció hasta hace poco –y es esta imagen visual la que me ayuda a materializar esta herramienta, particularmente cuando hay mucho ruido (ya sea interno o externo).

Perspectiva, para mí, significa contextualizar aquello que estoy sintiendo o pensando. Es poder ver el panorama completo de una situación, de una emoción, de una relación, de un incidente, o hasta de un pensamiento, para empezar a hacer sentido de eso. Es tomarme un paso atrás para ver el todo, más allá de las partes. Y creo que es una herramienta tan valiosa precisamente por eso: porque muchas veces nos podemos quedar enfrascados en un detalle pequeñito –en las partes– y cuando ganamos perspectiva y contextualizamos, podemos entender un poco mejor que está pasando. Por ende, extenderle un poco de aire y respiro a ese detalle que nos roba espacio en nuestra mente.

Hace poco estuve tratando de explicar esto, y quedé desarrollándolo con la analogía de cuando usamos una cámara y la ponemos en 0.5x para alejarla un poco. Para propósitos ilustrativos, se ve un poco así:

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Utilizaré el video que compartí anteriormente para ampliar mi idea:

Mientras más alejado el "zoom", más posibilidades tenemos de ver la imagen completa, más posibilidades tenemos de ver el atardecer y la lejanía que también son parte de la foto. Así mismo, imagino que podemos aplicarle esa perspectiva a nuestra mente: mientras más nos alejamos, más contexto ganamos sobre lo que estamos sintiendo/pensando/viviendo, y más podemos entender cuáles son los factores que influyen en esa situación en particular.

Con frecuencia –más de la que queremos admitir– ese "algo" que nos hace sentir algo intensamente, nos lleva a enfrascarnos y casi que tener una visión túnel de esa situación. De forma rápida, se nos va secuestrando nuestra capacidad de pensar, y corremos el riesgo de asumir, dar cosas por sentado, "asegurarnos" de saber lo que siente o piensa otra persona –y en realidad no lo sabemos. De esta forma, darnos perspectiva para contextualizar aquello que sentimos o vivimos, nos puede ayudar a oxigenar nuestra mente y nuestra alma. Y eso, nos puede ayudar a ganar más presencia y calma en nuestras relaciones y en nuestras vidas.

Por supuesto, que esto que propongo no se logra a la primera ni a la segunda, o incluso ni a la tercera. Es más, hasta me atrevería a quitarnos la presión de "lograrlo". Prefiero, en su lugar, extender la invitación de ponerlo en práctica cuantas veces podamos y en las oportunidades que tengamos. Quizás, la meta final no es ver "todo" en perspectiva, sino poder pillarme a mí misma/o en los momentos en los que esta habilidad sea útil y necesaria.

Hasta Hermione se tiene que recordar a sí misma de ponerlo en práctica.

Antes de iniciar el taller, me vi ante la necesidad de contextualizar el mes de diciembre que estamos viviendo en este momento. Un diciembre atípico, donde estamos sintiendo muchas mas libertades que los últimos dos diciembres y –probablemente– una necesidad de recuperar el tiempo perdido. Contextualizar socio-históricamente donde estamos ubicadas y ubicados, me permite entender un poco mejor esa sensación de apuro, rapidez y urgencia que he estado sintiendo. Y, al entenderla un poco más, puedo elegir no engancharme con ella y también brindarme un respiro por esa sensación abrumadora que trae consigo la urgencia.

Ganar perspectiva nos permite ubicarnos en el aquí y ahora, e inlcuso canalizar una emoción que viene muy útil en estas fiestas de fin de año: gratitud. En ese proceso de "alejarnos" para ver el panorama completo, también podemos ir encontrando los regalos que también son parte de la imagen; y, que por estar tan enfrascados (o con esa visión túnel) de los detallitos, podemos perdernos de vista. Ver la vida en 0.5x nos puede brindar la oportunidad de recoger y honrar aquellas joyitas que quizás se pierden de vista con un lente hiper-enfocado.

Mi intención con el newsletter de hoy es ofrecerte un lente diferente para mirar lo que estás experimentando en este momento: un lente en 0.5x. Quizás, al mirar mi mundo externo en 0.5x, puedo empezar a mirar mi mundo interno con ese lente también. Quizás, al mirar mis experiencias en 0.5x, puedo darle espacio a mis emociones y sensaciones –sin juicio, ni culpa, ni vergüenza. Quizás, al mirar el presente en 0.5x, puedo empezar a mirar mi vida con este lente, también. Desaprendiendo y reaprendiendo, cuantas veces sean necesarias, cómo mirar el panorama completo para así ganar más presencia e intencionalidad en lo único que tengo al alcance de mis manos: este preciso momento.

Mi gentil recorderis para el día de hoy:

"Le daré la bienvenida a todas mis emociones sobre este año." -**@newhappyco**

Si necesitas un epi para seguir pensando y reflexionando sobre el tema:

E009: ¿Por qué nos hacemos películas en la cabeza?

Y, ¿si hacemos sentido colectivamente?

Estoy TAN agradecida y conmovida por todas las personas que participaron en el taller virtual de fin de año que facilité esta semana.

Estoy profundamente conmovida por la confianza, tiempo y energía de todas y todos los que participamos del mismo. Uno de mis elementos favoritos de estos talleres es escuchar qué resuena en quienes participan y cómo están haciendo sentido de todo –lo que me hizo querer extender esta invitación a este espacio también.

Esta idea no es mía, se la robé a Ann Friedman –una de mis escritoras favoritas– y me encantaría establecerlo como una tradición para mi newsletter: una forma colectiva y comunitaria de hacer sentido de nuestro año. ¿Te animas?

Solo llena el formulario que te dejo abajo (es completamente anónimo), y las respuestas las sintetizaré y publicaré en el último newsletter del año. Será un experimento interesante para reconocer(nos) a través de las respuestas que leemos en otras y otros, y quizás encontrar algo de sentido en nuestras experiencias.

Haz clic aquí para contarme de tu año.

The White Lotus (2022)

Sabíamos que esto iba a estar en la recomendación, ¿no? Este domingo fue el final de la segunda temporada de The White Lotus, una serie que ya había compartido en mis recomendaciones hace algunas semanas y que –personalmente– creo que es mi serie favorita del 2022. Es una comedia, con tintes de drama y misterio (o un drama con tintes de comedia y misterio, también), que sigue la estadía de distintos personajes en un lujoso hotel en Sicilia.

Y creo que esa es mi parte favorita de la serie: los personajes. En general, me he dado cuenta que las series que me enganchan son las que tienen personajes complejos, multidimensionales, multicapa y humanos –quizás como un reflejo de mis personas favoritas, también.

¡Full recomendada! Disponible en HBOMax.

♥️Amorcito que recibe Adentro♥️

Hola Mariana,

Espero con mucha alegría tu newsletter cada viernes y cuando encuentro el momento para leerlo detenidamente, lo disfruto mucho.

-Juani M.