La magia de los procesos🪺
Me gustaría ofrecerte algunas preguntas para reflexionar sobre tu semana. Si puedes, regálate unos 10-15 minutitos para tomar una pluma y un papel, y permítete sentir el asombro que es parte de explorar y descubrir nuestra mente mientras escribimos:
¿Qué partes de tu ser sientes que se expandieron esta semana?
¿Cómo se siente reconocer esta expansión?
¿Qué te hubiese gustado incorporar en tu semana?
¿Cómo imaginas hacer espacio para ello en la próxima semana?
¿Cómo te sientes reflexionando en el aquí y ahora?
Espero que estas preguntas reflexivas te ayuden a afinar tu brújula interna para que, con ella, descifres la dirección que tu corazón y mente están necesitando que tomes en este momento.
En el news de hoy, escribo sobre los procesos:
- 🪺Lo mucho que estoy disfrutando reconocer la magia que habita en ellos
- 📓¡Última llamada para nuestra sesión en vivo de journaling de este mes!
- 📰Te cuento mis recomendaciones –el canal de YouTube al que he estado ansiando regresar todos los domingos.
Como siempre, te comparto el acompañamiento musical para esta edición. Y, también te recuerdo que aquí puedes encontrar el playlist oficial de adentro.
Soy una curiosa de los rituales de las otras personas: me interesa saber cómo inician sus días, cómo se organizan, cómo se preparan, cómo eligen qué van a desayunar, cómo eligen qué se van a poner, cuál es un ritual indispensable para su día a día. Con frecuencia, quizás más de las que me gustaría admitir, me encuentro fisgoneando en encuentros cotidianos sobre cómo alguien prepara sus pancakes para que le queden esponjosos o por qué alguien prefiere hacer ejercicio en la noche en vez de la mañana. Quizás por eso gravito tanto a los vlogs, porque me encanta tener una miradita más cercana a los rituales de la gente. Al final, soy una curiosa de los procesos. Y creo que escuchar este fin de semana al colectivo de artistxs panameñxs, Nuestra, hablar sobre la importancia de reivindicar los procesos, finalmente entendí por qué.
En el conversatorio que facilitaron en el Museo de Arte Contemporáneo (MAC Panamá), me encontré sintiéndome fascinada por absolutamente todo lo que compartieron: cómo ha sido sostener dos años de complicidad creativa y artística, la manera como sus guillas se fueron transformando durante ese tiempo, cómo el afecto, la amistad y la responsabilidad han sostenido estos dos años de exploración, y cómo se han vivido el proceso. Me noté diciéndome a mí misma mientras les escuchaba: "es que esto es una reivindicación del proceso."
Cuando les escuchaba, pensé sobre el tremendo acto de vulnerabilidad que es permitirse ser presenciado durante un proceso –y esto puede ser tan literal o metafórico como tú elijas interpretarlo. Y creo que conectarme con la vulnerabilidad que eso puede evocar habla más de mí. Quizás que el proceso sea un eje central en este newsletter –no me refiero solamente a esta edición, sino que sea un personaje recurrente en muchas ediciones– también habla de mí. Quizás que me resuene tanto esta palabra, habla de mí.
Ver el "behind-the-scenes" (tras bambalinas) de cómo se creó algo me resulta alucinante. Hilar todas las piezas que se tuvieron que dar para llegar a eso me deja sintiéndome profundamente asombrada. Recuerdo que esa fue una de las razones por las cuales me disfruté tanto la serie documental de los Beatles: fue una celebración al proceso creativo.
Si bien mucho de mi trabajo es enfocado en reclamar los procesos –de las emociones, de las vivencias, de las experiencias, de la vida– yo me considero una persona muy orientada en resultados. Con frecuencia. tengo la imagen clara de lo que quiero hacer, y me noto sintiéndome muy irritada cuando no se ve e-xac-ta-men-te igual a como me lo imaginé en mi mente. Sé exactamente cómo quiero que se vea ese post. Sé exactamente cómo quiero que se vea ese workbook. Sé exactamente cómo quiero que se vea ese taller. Sé exactamente cómo quiero que se vea ese curso. Sé exactamente como quiero que se vea ese día. Sé exactamente cómo quiero que se vea esa receta. Sé exactamente cómo quiero que se vea esa salida.
A veces, estoy tan enfocada en el resultado, que me quiero saltar el proceso o navegarlo lo más rápido posible. No me encanta admitir esto de mí misma, pero es verdad.
Y cuando a esto le agregamos vivir en una sociedad y en una cultura tan orientada al resultado, pues es mucho más fácil y tentador caer en esa trampa. Vivimos en una sociedad que glorifica "llegar a los lugares": graduarte, conseguir trabajo, casarte, tener hijos, tener la casa, jubilarte. Y, muchas veces, podemos estar tan enfocados con lograrlo, que nos saltamos el proceso de sentirlo. Creo que me encuentro gravitando mucho a espacios, conversaciones y contenido que me recuerdan la magia del proceso porque me ayuda a desafiar esa trampa.
Curioseamente, al escribir esto me estoy dando cuenta que no me conecto con este newsletter de esa manera: de hecho, muchas veces hago clic en el botón de "nuevo post" para empezar a armarlo, y no tengo idea de qué voy a escribir o cómo lo voy a hilar. Este espacio es muy orientado en el proceso... quizás por eso me gusta tanto.
¿Acaso no es la vida un proceso en sí? Daniel siempre me dice: enamórate del problema. Me ha costado entender esto (y, con frecuencia, me he notado frustrada cuando me lo dice) porque soy una persona que se enamora más rápido del resultado. Pero enamorarnos del problema nos invita a permitir que el proceso guíe, a descubrir y cambiar de opinión, a reajustar, a refrescar, y volver a intentarlo cuantas veces se necesite. Enamorarnos del problema es permitirnos auto-actualizarnos y colaborar con la vida.
Estoy escribiendo esto para mí, yo creo. Porque de vez en cuando me sirve el recordatorio de que hay magia en el proceso. Para recordarme que yo soy un proceso, y que estoy siempre siendo. Hay una frase del aclamado psicoanalista británico, Wilfred Bion, que se me viene a la mente mientras escribo esto:
"Convertirse" es un proceso que empieza, continúa y nunca finaliza.
La invitación de la edición de hoy va por ahí: permitámonos re-enamorarnos de la magia que habita en el convertirnos, y contagiemos a nuestros proyectos, relaciones, trabajos y diario vivir con esa misma filosofía. El proceso es algo maravilloso por sí solo, no solamente porque nos lleva a un lugar. En él, habitan miles de oportunidades para pensarnos, conocernos y descifrarnos. Regalémonos la presencia y la gracia para notar y escuchar lo que nos quieren decir los procesos que habitamos, y para recibir su sabiduría con la más cálida de las bienvenidas.
Como siempre, gracias por leerme.
Mi gentil recorderis para el día de hoy:
¡Última llamada para nuestra sesión en vivo!
Este sábado 24 de agosto estaré facilitando una sesión guiada de journaling en nuestro espacio de acompañar para invitarte a pensar sobre tu relación con el dinero.
El dinero, queramos o no, es una parte fundamental de nuestra vida. Simboliza una infinidad de temas: seguridad, estatus, libertad, secretismo, poder, alegría, vergüenza, angustia, entre muchos otros. Ocupa un lugar en nuestra mente, en nuestras relaciones y en nuestro mundo interno. Y, como muchos de los temas que aparecen ahí, me parece muy valioso descubrir qué significa ese tema para ti. Es solo a través de la exploración interna y de la toma de conciencia que podemos regalarnos la libertad de elegir el lugar y la forma que queremos que ocupe.
¿Me permitirías ser tu guía en esta exploración y descubrimiento?
La sesión dura alrededor de dos horas y solo necesitas un espacio tranquilo, un journal, algo para anotar y muchas ganas de mirar hacia adentro. Si te interesa, pero no puedes participar a la sesión en vivo, la misma quedará grabada y almacenada en nuestra videoteca que ya tiene 30 sesiones de journaling (!!!).
Por solo $10 mensuales o $100 anuales, puedes tener acceso a esta sesión en vivo y nuestra videoteca llena de todas las sesiones de journaling que hemos hecho a lo largo de estos dos años y medio. Haz clic abajo y actualiza tu membresía para ser parte de acompañar. Me encantaría verte ahí, ¡te espero!
Te comparto las recomendaciones de contenido que he estado disfrutado recientemente.
YouTube
Jodie Melissa Rogers
Muy en el hilo de la magia de los procesos, ver vlogs en YouTube son uno de los más concretos recordatorios que tengo. No sé si descubrí a Jodie via TikTok, Substack o YouTube (es difícil a veces precisar cómo y donde descubro el contenido que termino consumiendo), pero me he encontrado sintiéndome emocionada de ver sus vlogs los domingos por la noche, antes de iniciar la semana.
La misión de Jodie es recordarnos a vivir una vida más lenta, calmada, pausada e intencional –¿suena familiar? Y ver sus vlogs antes de dormir me llenan de una reflexión y un deseo de incorporar una suavidad similar en mis días. No sé si en algún momento yo quede haciendo vlogs (la verdad es que los amo tanto, que no es algo que descarto👀), pero siempre que los veo me noto sintiendo admiración completa por el cariño y amor que estas creadoras le meten a sus videitos.
Puedes ver sus videos haciendo clic abajo:
¿Qué has estado leyendo, escuchando o viendo recientemente que te ha encantado?
¡Desliza hacia abajo, haz clic en los comentarios y cuéntame qué me recomiendas!
♥️Amorcito que recibe Adentro♥️
Todo para recordarlo con más precisión y cariño. Pero diste en el clavo con su joie de vivre.
-PR, en respuesta a una de mis más recientes entradas "Joie de vivre"
Para escribir en tu journal
- ¿En qué procesos te encuentras ahora mismo?
- ¿Qué magia puedes encontrar ahí? ¿Qué te están mostrando de ti?
- ¿Qué sabiduría habita en tus procesos en el aquí y ahora?
Reenvíaselo a alguien cuyo proceso creativo te genere demasiada curiosidad.
Si estás visitando, recuerda suscribirte aquí.
Un abrazo,
Mariana♥️