Colaborando con la vida💫

Para mí, un nuevo mes significa revisión, reflexión y reajuste: de mis necesidades, de los rincones de mi vida que están pidiendo atención, de mis responsabilidades, de mi creatividad, y de mis propósitos. ¿Dónde estoy? ¿Dónde quiero ir? ¿Cómo llego allá? Mi mes de agosto será un mes de mucha familia y de trabajo tras-bambalinas; tengo algunos talleres que me requieren en la "tarima", pero también tengo algunos proyectos creativos que estarán recibiendo una revisión pausada, y eso me emociona mucho.

Se siente rico destinarle suficiente tiempo al nacimiento de una idea, y eso es lo que este mes me está pidiendo –en septiembre espero estar compartiéndote el resultado final, pero mientras tanto, aquí estaré disfrutándome el proceso.

En el news de hoy, escribo sobre la relación colaborativa con la vida:

• ✨Te cuento eso qué significa para mí
• 📓Anuncio nuestra sesión de agosto de acompañar
• 📰Te cuento mis recomendaciones –la exposición que me recordó por qué necesito más arte en mi vida; la serie documental que me encontré no pudiendo pausar; y la entrevista que me evocó una nueva admiración a los procesos creativos.

Como siempre, te comparto el acompañamiento musical para esta edición. Y, también te recuerdo que aquí puedes encontrar el playlist oficial de adentro.

Hay una frase que escuché hace años en un episodio del podcast de Oprah, a la cual me noto regresando con frecuencia:

"La vida nos susurra, nuestra tarea es abrir el espacio para escucharla."

Cuando se la compartí a mi terapeuta, ella la complementó y me dijo: "sí/pero/también, a veces esos susurros se vuelven gritos y, cuando no la escuchamos, la vida también se cansa de estar hablando sola."

La vida nos susurra en señales, en sueños (metafóricos y literales), en emociones, en energía vital que está disponible de manera limitada, en intuición –ese golpe en el estómago que se siente imposible de ignorar–, en mensajes, en serendipia, en "coincidencias", en algoritmos, en decisiones que ya tomamos pero que se nos dificulta aceptar y sostener la culpa o incomodidad que vienen de ellas. En los susurros de la vida hay una invitación de escuchar, de honrar, de actuar, de responder, de practicar la congruencia, de perfeccionar la intencionalidad –pero, más importante aún, hay una invitación para desarrollar una relación colaborativa con Ella.

Pienso en el tipo de rasgos que disfruto en mis colaboraciones: respeto, responsabilidad, confianza, esperanza, humildad, recepción, escucha y apertura, por nombrar algunas. Y, pienso en que estos mismos rasgos son los que quiero que definan mi relación colaborativa con la vida.

Quiero una relación colaborativa basada en el respeto que Ella va a decidir quién, cuándo, cómo, qué y dónde; recae en mí respetar sus tiempos. Quiero una relación colaborativa basada en la responsabilidad de escuchar y honrar sus mensajes; porque si bien sus tiempos están fuera de mi control, yo tengo la responsabilidad de navegar esas circunstancias y dirigir hacia donde quiero que vayan en mí. Quiero una relación colaborativa basada en la confianza de que hay una razón más grande sobre por qué está revelándose (que a veces se siente más bien como si se escribiera con "b") de la manera en la que lo está haciendo –quizás difícil para mi de entender hoy, y cuyas respuestas "racionales", incluso, nunca lleguen.

Quiero una relación colaborativa basada en la esperanza de co-descubrir, junto a Ella, lo que tiene preparado para mí. Quiero una relación colaborativa basada en la humildad de reconocer mis propias limitaciones como ser humano en este mundo. Quiero una relación colaborativa basada en la recepción, escucha y apertura de recibir sus mensajes con gracia y sabiduría. Quiero colaborar con la vida de una manera que se sienta deliciosamente creativa. Quiero acomodar mis tiempos, mis sueños, mis deseos a sus planes; y alejarme del sufrimiento que viene con asumir que es Ella quien tiene que acomodarse a mí.

Pienso en el desgaste que ocasiona en una pieza de rompecabezas cuando intentamos que encaje en un lugar que simplemente no está funcionando para ella. Pienso en las razones por las que nos podríamos enfrascar en este comportamiento, quizás enfocados en que esa pieza "encaje" para ya terminar con el rompecabezas. Estar tan enfocados en el resultado deseado, a veces nos lleva a forzar procesos que nos pueden terminar desgastando. Pienso en usar esta metáfora para pensar en la vida: en lo tentador que puede ser forzar una decisión, una relación, o un comportamiento. Pienso en todos los susurros que la vida nos ofrece para avisarnos que esa pieza no está encajando. Pienso en las razones por las cuales podríamos ignorar esos susurros: miedo, control, expectativa, culpa, por nombrar algunas. Y, pienso en lo distinto que se sentiría todo si nos alejamos de la presión de hacer que algo encaje "a la fuerza" –sea eso un ritmo, tiempo, decisión o perspectiva distinta al que nos está mostrando la vida–, y nos acercamos a enamorarnos del proceso de notar, escuchar y colaborar con Ella.

Escribo sobre tener una relación colaborativa con la vida porque creo que hay muchos tiempos, planes y energías que –como simples mortales que somos– desconocemos y no manejamos. Hacemos planes para ir al parque, y amanece lloviendo. Fantaseamos con la idea de ser increíblemente productivas y completar nuestra lista de tareas, y nos olvidamos que estamos en la fase lútea de nuestro ciclo menstrual. Decidimos que este es el fin de semana que limpiaremos el closet, y nuestra mejor amiga recibe a su primera bebé ese sábado en la mañana. O, como escribió la honesta Joan Didion en su memoria,

"La vida cambia rápidamente. La vida cambia en un instante. Te sientas a cenar y la vida como la conoces, termina." - Joan Didion, The Year of Magical Thinking

Colaborar con la vida, para mí, es prestar atención a lo que está ocurriendo en el aquí y ahora, y acomodar mis planes, deseos, rutas y fantasías para encontrarme con Ella en la mitad del camino. Es abrirme a la naturaleza cíclica que habita en todas partes –en la naturaleza, en la luna, en el cuerpo, y en la vida– y confiar en que el aspecto cíclico está ahí por una razón; como si sutilmente nos estuviese diciendo "eventualmente, pero ahorita no."

Colaborar con la vida nos pide confianza absoluta, pero no solamente en Ella, sino en nosotras y nosotros. Especialmente, en nosotras y nosotros. Usualmente cuando nos comunicamos con la vida desde un estado de urgencia o de control, es porque quizás lo que hay debajo de eso es miedo, escasez y ansiedad –miedo a que si no pasa ya, no pasará nunca. A veces, nos da miedo esperar. A veces, nos da miedo quedarnos con la incomodidad pasajera y temporal, porque quizás muy en el fondo, no confiamos con que podemos con ella. Y quizás no podremos descubrir que podemos con el misterio de la vida, hasta que nos permitimos estar con el misterio de la vida.

La reflexión de hoy no tiene una intención específica. Genuinamente te quería compartir lo que ha estado pasando por mi mente, y dejar el espacio disponible para que tomes lo que resuena y dejes lo que no. Pero si algo resuena, toma eso como una señal que la vida te está susurrando –y eso sí te voy a invitar a que hagas: ábrete a mirar hacia adentro para descubrir por qué está resonando en este momento de tu vida.

Te mando un abrazo fuerte y, como siempre, gracias por leerme.

Mi gentil recorderis para el día de hoy:

Nuevo mes, nueva sesión de journaling...

En la sesión de este mes de acompañar estaremos mirando de cerca nuestra relación con el dinero. Mi intención con la sesión de journaling de este mes es:

repensar nuestra relación con el dinero para, quizás así, crear una narrativa más armoniosa para nosotras/os mismas/os.

Es una sesión que me emociona mucho porque el dinero es un elemento tan importante en nuestras vidas, pero es tratado como algo oculto –es como el Bruno del mundo interno (referencia de la película de Encanto). Espero que, pensando sobre este tema, podamos ir abriendo espacios para pensar sobre nuestra relación con el dinero e irle poniendo una carga más armoniosa en nuestras vidas.

Por solo $10 mensuales o $100 anuales, puedes tener acceso a esta sesión en vivo y nuestra videoteca llena de todas las sesiones de journaling que hemos hecho a lo largo de estos dos años y medio. Me encantaría verte ahí, ¡te espero!

Te comparto las recomendaciones de contenido que he estado disfrutado recientemente.

Arte

Arcanos Cercanos por Nuestra Colectiva (MAC Panamá)

El jueves pasado fui a la inauguración de la exposición de Nuestra Colectiva, "un grupo cómplice que, desde 2019, ha construido un espacio para el desarrollo de proyectos y obras, guiado por las premisas del intercambio, la producción y el afecto." Lxs artistas panameñxs que lo conforman incluyen a: Gabriela Esplá, Carola Gelabert, Christian Pérez Vega, Libertad Rojo y Andrea Santos.

Arcanos Cercanos es "el resultado de un proceso de producción de dos años. Todo empieza con una guilla, la obsesión, el enredo mental; luego la disposición nos acerca al problema (...) Es una invitación a encontrar lo desconocido en lo conocido, y a revelarse a uno mismo a través del arte."

Fue muy especial para mí, por varias razones:

• Hay algo muy admirable y reivindicador en ver a un grupo de artistas jugar y presentar piezas de arte que han sido creadas en un espacio seguro y sagrado, fundamentado en la confianza mutua, amistad y respeto.
• Mi querida amiga, Gaby, y mi adorada cuñada, Carola, forman parte de esta colectiva –y es tan emocionante para mí acompañarlas en sus exposiciones, presenciar sus evoluciones y celebrar sus talentos junto a ellas.
• Fui a su segunda exposición en el 2021 y es asombroso ver su proceso desde entonces. Siempre me encuentro movida y atraída a un elemento diferente, y eso me resulta emocionante.
• En la parte de atrás de la exposición, hay una recopilación del proceso creativo de estos últimos 5 años con fotografías, bosquejos, cuadernos y borradores; y sale un personaje muy especial para mí🤍:

Documental

Simone Biles: Rising (2024)

Por supuesto que he me desperté a las 7:30 a.m el domingo pasado a ver a Hillary Heron debutar en sus primeras olimpiadas. Por supuesto que lloré durante toda su presentación. Por supuesto que no he parado de ver la gimnasia artística femenina. Por supuesto que ver a Simone Biles me vuela la cabeza. Por supuesto que me vi su serie documental en Netflix. Por supuesto que quedé investigando exhaustivamente sobre los twisties y la salud mental de las atletas profesionales de gimnasia artística.

Por supuesto que te estoy recomendando que lo veas –disponible en Netflix.

Entrevista

Maggie Rogers x Apple Music (2024)

Hay un clip que se hizo viral hace algunos años donde Pharrell Williams hizo un masterclass en NYU donde alabó a una, entonces estudiante, prodigiosa artista emergente: Maggie Rogers. Si bien esto catapultó a Maggie hacia un inicio luminoso en su carrera musical, también ejerció mucha presión en ella –presión que la llevó a pausar su camino musical en el 2021 (incluso casi renunciar al mismo) y regresar a estudios académicos para re-encontrarse con su propósito de hacer música. Esta entrevista sobre nuevo álbum –de donde salió el acompañamiento musical de hoy– me emocionó demasiado: fue muy inspirador verla incorporar el juego (hay un tema aquí) en su proceso creativo, escuchar su pasión y amor detrás de los procesos y qué la llevó a crear este álbum.

Si te intriga/emociona/genera curiosidad los procesos creativos de los artistas, te recomiendo ver esta entrevista –disponible en YouTube haciendo clic abajo:

¿Qué has estado leyendo, escuchando o viendo recientemente que te ha encantado?

¡Desliza hacia abajo, haz clic en los comentarios y cuéntame qué me recomiendas!

♥️Amorcito que recibe Adentro♥️

Este newsletter me cayó como anillo al dedo.

-AGM, en respuesta a mi última entrada "Pensando en la dieta mediática"

Para escribir en tu journal

1. ¿Qué te está susurrando la vida en este momento?
2. ¿Cómo puedes colaborar con Ella?
3. ¿Cómo se siente verlo de esta manera?

Reenvíaselo a alguien que le agradeces a la vida por habértela regalado en ese momento de tu vida.

Si estás visitando, recuerda suscribirte aquí.

Un abrazo,

Mariana♥️